Donna Haraway

Feminista, bióloga, filósofa, creadora del Manifiesto Cyborg / 1944-presente
Donna Haraway nació el 6 de septiembre de 1944 en Denver, Colorado, Estados Unidos, en el seno de una familia católica de descendencia irlandesa. Es profesora con formación en biología, pero también ha seguido estudios de filosofía, literatura y zoología. Se graduó en Zoología y Filosofía en 1966 en el Colorado College, gracias a una beca de la fundación Boettcher.
Participó activamente en la llamada segunda ola del feminismo en los años 70’s. Vivió en París estudiando filosofía de la evolución con una beca Fulbrigth y luego completó su doctorado en el Departamento de Biología en la Universidad de Yale en 1972.
Haraway, es reconocida por sus estudios sobre la mujer y su relación con la ciencia, género y sociedad. Sus contribuciones abarcan desde la primatología, la filosofía y la biología del desarrollo. Actualmente es profesora emérita distinguida del Programa de Historia de la Conciencia en la Universidad de California.
Se define su postura a lo largo de su trayectoria como una historiadora de la biología. En sus estudios iniciales se enfocó a reflexionar entorno a los saberes dentro de la biología desde mediados del siglo XIX hasta la década de 1930: la biología tiene una historia y debemos descubrir el rol que juega como un saber y una práctica en la historia de las sociedades occidentales contemporáneas.
En este sentido, nos invita a identificar los mitos centrales del origen de la cultura occidental que han funcionado como herramientas para separar y luego someter aquello que se considera lo otro.
Su obra más reconocida, Manifiesto Cyborg (1985), se publica un año después del estreno de la película Terminator (1984), en el cual Haraway nos invita a no pensar al cyborg dentro del imaginario tecnocientífico, masculino y militarizado (¿qué pasaría si terminator fuera una mujer reformadora socialista y feminista con compañeros animales y máquinas en la búsqueda de construcción de nuevos mundos?), sino como una crítica al capitalismo patriarcal, con una propuesta política feminista-socialista que reflexiona entorno a cómo la ciencia occidental nos ha impuesto la creencia de que humano, animal y máquina somos seres diferentes, cuando en realidad coexistimos de tal manera que al final somos uno solo: cyborgs.
Haraway propone la figura del cyborg, pensándolo como una mezcla de humano-animal-máquina sin género que cuestiona los límites que la sociedad capitalista impuso para definir lo que es un hombre, una mujer, un humano, un animal o una máquina y suavizar las dicotomías humano-animal, naturaleza-cultura, realidad-ficción, hasta finalmente disolverlas, para lo cual nos invita a situarnos en nuestro presente, a partir del conocimiento de nuestro pasado (historia de la ciencia occidental), para por fin poder pensar en futuros alternativos.
En su obra, conduce a comprender la penetración que la cibernética tiene en cada aspecto de nuestra realidad social y cómo nos ha cambiado, para poder desarrollar una estrategia de liberación que permita que la relación humanidad-naturaleza-tecnología pueda coexistir sin violencias contradictorias.
Por un futuro responsable, no totalizador y genuinamente enriquecedor.